Que feo no poder decir eso que quiero gritar,
eso que me tiene mal hasta los huesos,
eso que un par de años atrás repetía sin cesar.
Eso que se acompaña con un buen beso
y un abrazo para variar.
Eso que pese a la distancia aún estando a su lado
lo dibujo al aire para no errar.
¡Que desdicha de aquel que pase por lo mismo!
No hay manera de callarlo,
de una u otra forma lo digo,
lo repito sin cansancio.
Mis ojos, mis manos,
todo mi cuerpo lo recita,
lo canta... lo grita.
No hay lluvia que borre sus huellas,
ni sol que evapore su intensidad.
Los días le acentúan su grandeza,
la distancia su pureza.
Lo sabe...
Ha cerrado los ojos para no verlo,
se ha tapado los oídos para no escucharlo.
Lo sabe...
lo ha sentido en su lado izquierdo,
me lo dicen sus ojos,
me lo dicen sus ganas.
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